Con la llegada del mes de junio, se acerca el final de la temporada deportiva para muchos niños y niñas. Una vez acabe también el periodo escolar, empiezan de verdad unas largas vacaciones en que uno de los retos tendrá que ser que nuestros hijos no se apoderen del sofá y del mando a distancia y tengan una vida excesivamente sedentaria
De acuerdo con el Canal Salud de la Generalitat, encontramos que un 35,9% de los niños y niñas entre 6 a 12 años tienen exceso de peso (el 24,2% tienen sobrepeso y el 11,7%, obesidad).
Esto nos sitúa en uno de los primeros lugares a Europa en prevalencia de obesidad infantil. Y sabemos cuáles son las dificultades que esto supone, porque las personas con sobrepeso corren más riesgo que el resto de sufrir un accidente cerebrovascular o una enfermedad cardíaca. Este riesgo se calcula entre un 30% y un 40% más que entre las personas sin sobrepeso.
Hay varios estudios e informes que indican que, desde que estalló la pandemia, el consumo de pantallas en niños se ha disparado. La plataforma Qustodio afirma que el tiempo dedicado al video en línea entre los menores ha crecido un 25%; en aplicaciones de videojuego, un 23%; y en las redes sociales, un 76% más. De media, dedicamos tres o cuatro veces más tiempos a actividades sedentarias que a la realización de actividad física. La pandemia ha agudizado este desequilibrio.
Este tipo de actitudes se pueden revertir y, la llegada del verano y el buen tiempo, es un momento idóneo para hacerlo y poner nuevos retos a nuestros hijos e hijas. Hace falta, por ejemplo, limitar las actividades de sofá en una hora en el día, como máximo. Los adultos también tenemos que dar ejemplo mostrando las ventajas de movernos.
Evitar el sedentarismo infantil
Salimos a pasear, a correr o a cercar por la montaña, a pie o en bicicleta, jugamos a fútbol o a pádel o nadamos, el que haga falta. También podemos idear sorpresas que sirvan para estimular la actividad física con una excursión que no estaba planificada, un fin de semana a la natura y cualquier actividad que haga descubrir que el entorno natural es lleno de posibilidades y de rincones interesantes. Evitar el sedentarismo infantil no cuesta tanto y es un factor de salud importantísimo para el resto de la vida.