Las enfermedades cardiovasculares, aquellas que afectan al corazón o al sistema circulatorio, son la primera causa de muerte en España, donde cuestan la vida cada año a cerca de 119.000 personas -el 26,4% del total de fallecimientos– y a casi 18 millones de seres humanos en todo el mundo.
Estas patologías provocan el 17% de las bajas laborales en España, según datos de la Fundación Española del Corazón. Además, pueden generar incapacidad si se mezclan factores como la propia naturaleza del episodio y una deficiente recuperación.
La reducción de la incidencia de estas enfermedades se basa en el control de los factores de riesgo cardiovascular modificables (dislipemia, diabetes, hiper